Anoche nos embarcamos en una ruta totalmente diferente a lo que estamos acostumbrados, combinando nuestra parte más serrana con algo de la más escasa urbanita.
Y el resultado, creemos, no pudo ser mejor: agradable ascensión al cerro de San Antón con las últimas luces del día; cena a la luz de la ciudad de Málaga, la luna, planetas y las estrellas (con una fugaz incluida y observaciones con telescopio) ; descenso en la oscuridad y de postre, los fuegos artificiales que, dicho sea de paso, se ven más espectaculares en las fotos que lo que vimos en directo…
Muchas gracias a tod@s por vuestra asistencia, nos vemos el 10 de septiembre con un nuevo Senderismo para Tod@s, en esta ocasión en… ¡los puentes colgantes de Monachil!